La familia Palomino fue un linaje que tuvo una enorme influencia en la capital del Santo Reino entre los siglos XVI y XVII precisamente por los negocios que estos mantenían con el Concejo, al que sirvieron acendradamente, llegando incluso hasta ocupar puestos tales como Caballeros Veinticuatro o Procuradores en la Corte Española.
El
origen de esta familia nobiliaria proviene de Andújar. Sin embargo, el primer
miembro de la misma en llegar a nuestra ciudad fue Alonso González Palomino,
que residió en un palacio situado en la Collación de Santiago frente a las casas
del Jurado Ballartes a finales del siglo XV.
Alonso
tuvo un hijo, al que bautizaron Rui. Este último contrajo matrimonio dos veces,
primero con doña María de Moya y posteriormente con Catalina Gutierrez. Ruiz
González Palomino tuvo cuatro hijos con su segunda mujer, a los que llamó
Diego, Rodrigo, Gonzalo y Bachiller Martín Palomino. Falleció en 1507.
De
Bachiller Martín no se ha podido recabar datos relacionados con su vida privada
o profesional. El hijo mayor, Diego, fue Caballero Veinticuatro en Jaén y Depositario
General de la ciudad de Jaén. Rodrigo Palomino, apoderado El Viejo, fue Escribano
Público de Torredelcampo. Y Gonzalo Palomino fue también Caballero Veinticuatro
y Escribano Público de la capital del Santo Reino. Todos ellos tuvieron una amplia
descendencia.
Por
desgracia para esta estirpe empezaron a perder influencia hasta convertirse en
una familia noble más de la provincia a mediados del siglo XVII, perdiendo todo
el poder que en sus años gloriosos ostentaban.